El paste de Hidalgo es una deliciosa especialidad culinaria que se originó en este estado y son una versión local de los tradicionales Cornish.
El paste de Hidalgo son un tipo de empanada rellena que se originó en el Reino Unido y que se ha popularizado en muchas partes del mundo. Estos pastes se hacen con una masa quebrada o de hojaldre, y se rellenan con una mezcla de carne, vegetales y otros ingredientes según la región y la tradición culinaria.
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Son particularmente famosos en Hidalgo, en donde la tradición de este platillo ha cobrado fama nacional gracias a su increíble sabor.
¿Ya los has probado? Aquí te contamos más de esta delicia culinaria.
Origen del paste
Los pastes son especialmente populares en la región de Cornualles, en el suroeste de Inglaterra, donde se elaboran los conocidos “cornish pasties”. Estos pasteles se caracterizan por su forma semicircular, su textura crujiente y su relleno de carne, papa y otros ingredientes, que los convierte en una comida completa y portátil.
El origen del paste se remonta a las minas de Cornualles, Inglaterra, en el siglo XIX, donde los ingenieros y trabajadores mineros comían “cornish pasties”, que se convirtieron en un símbolo de la clase obrera.
Cuando los trabajadores de las minas inglesas llegaron a México debido al agotamiento de las reservas de estaño en Inglaterra, trajeron consigo esta deliciosa receta.
Además de su origen inglés, en Hidalgo son una versión local de los pasteles que se elabora con una mezcla de papa, carne y verduras, y que se ha convertido en una especialidad culinaria de la región.
¿Cómo surge el paste de Hidalgo?
Según la UAEH, los pastes llegaron a Real del Monte, Hidalgo, a principios del siglo XIX, como una forma de calmar el apetito o por su funcionalidad. El paste de papa con carne es un reflejo de la herencia culinaria inglesa.
Desde entonces, el paste se convirtió en parte de la gastronomía en Hidalgo, y su nombre se transformó de “pasty”, que significa empanada en inglés, a “paste”, debido a la pronunciación en español. Los pastes eran un alimento pequeño que no manchaba y se podía comer con las manos, lo que los hacía perfectos para transportar al trabajo.
Los pasteles eran ideales para transportar y gracias a su borde cerrado, se podían comer sin contaminación de arsénico, el cual era común en las manos de los mineros. Después de comer, los pasteles se desechaban en un lugar alejado.
En 2018, el Municipio Mineral del Monte fue declarado “Cuna del Paste en México” y se consideró patrimonio gastronómico y cultural del estado de Hidalgo debido a su historia e impacto de más de 200 años.
Diferencias entre el paste de Hidalgo y la empanada
La principal diferencia entre un paste y una empanada es su origen y la forma en que se preparan. Los pasteles, también conocidos como paste de Hidalgo en México, se originaron en la región de Cornualles, en el suroeste de Inglaterra, y se caracterizan por su forma semicircular y su relleno de carne, papa y otros ingredientes. Los pasteles se hacen con una masa de hojaldre o quebrada y se hornean para obtener una textura crujiente y dorada.
Por otro lado, las empanadas son originarias de América Latina y España, y consisten en una masa quebrada rellena de diversos ingredientes, que pueden incluir carne, pollo, pescado, vegetales, queso y otros. Las empanadas se pueden preparar al horno o fritas, y su forma puede variar según la región y la tradición culinaria.
Otra diferencia importante es que los pasteles son típicamente más pequeños y se comen con las manos como un snack o comida rápida, mientras que las empanadas pueden ser más grandes y se sirven como un plato principal. En resumen, aunque ambos son tipos de pies rellenos, los pastes y las empanadas tienen orígenes y preparaciones diferentes, y se caracterizan por sus propias tradiciones y sabores únicos.