La bancada de Morena arrancó la ruta legislativa de la Reforma Electoral que pretende eliminar el INE para crear un nuevo organismo más pequeño cuyos integrantes sean electos en votación popular en urnas.
La propuesta busca también achicar el Tribunal Electoral, aplicar recortes financieros a los órganos comiciales y eliminar legisladores plurinominales lo que limitaría la presencia de opositores.
A propuesta del coordinador de Morena, Ignacio Mier, en la sesión de comisiones unidas de Puntos Constitucionales, Reforma Política-Electoral, y de Gobernación, presidida esta última por el dirigente priista Alejandro Moreno, se aprobó la creación de un grupo de trabajo con 21 integrantes.
Con tres representantes por partido político, el grupo de trabajo deberá retomar las propuestas de 107 iniciativas de Reforma Electoral en nivel constitucional y en leyes secundarias.
La vicecoordinadora de Morena, Aleida Alavez, remarcó que el objetivo de la reforma es lograr la austeridad en los órganos electorales “Vamos por un nuevo sistema electoral en México, un sistema que sea austero, en el que se erradique la corrupción, la dilapidación del erario y garantizar un sistema electoral certero, legal, imparcial, objetivo e independiente”, sostuvo la legisladora morenista.
El grupo parlamentario del PRI, encabezado por Alejandro Alito Moreno, se dijo dispuesto a una negociación por una democracia “menos onerosa”.
“Estoy seguro de que podemos encontrar consensos que abonen a un sistema electoral más transparente, más confiable y menos oneroso”, planteó Moreno Cárdenas, en una reunión en la bromeaba con Mier y trataba de disimular carcajadas, mientras otros legisladores tomaban la palabra.
Así, le toma la palabra a Morena para aplicar recortes a los órganos electorales y procurar desaparición de estructuras que lleven a un ahorro en el gasto electoral.
Las bancadas del PAN y PRD accedieron a negociar una eventual reforma, mientras que Movimiento Ciudadano se levantó de la mesa.
El coordinador del PAN, Jorge Romero, se sumó a la negociación de la Reforma Electoral, con la precisión de que no aceptarán reformas que afecten las facultades de las autoridades electorales.
Horas después de arrancar en la Cámara de Diputados el proceso para diseñar una Reforma Electoral, el presidente del INE, Lorenzo Córdova, insistió en que ésta no es para mejorar el sistema democrático, sino para propiciar “la captura” del instituto.
“La Reforma Electoral no siempre es un mecanismo para mejorar lo que se tiene, puede también ser un mecanismo para regresiones antidemocráticas”, indicó en una conferencia en la Escuela Judicial Electoral.
Rolando Herrera I Agencia Reforma