La historia de este municipio de Hidalgo es poco conocida, pero es bastante rica en cultura. Se trata del Pueblo Mágico de Zimapán.
En este municipio se encuentra el Parque Nacional Los Mármoles, donde se unica la exfundidora “La Encarnación”, que fue fundada en 1815.
En este rincón hidalguense había una mina en la que se extraía fierro. Con este metal que trabajaban los obreros de la fundidora se llegaron a construir importantes edificaciones en varias ciudades del país.
El recurso que nos dio la tierra hidalguense tuvo un gran significado a nivel internaacional, pues el hierro fundido fue parte de una de las obras arquitectónicas más trascendentes de la historia moderna.
En “La Encarnación” se forjaron piezas para la Torre Eiffel. Se dice que en los cimientos de la edificación francesa se puede encontrar la marca de la fundidora hidalguense.
De las 18 mil 38 piezas que conforman el monumento de la ciudad del amor, se desconoce la cantidad que fueron elaboradas en Hidalgo. Oficialmente la Torre Eiffel fue inaugurada el15 de mayo de 1889 y se emplearon 2.5 millones de remaches para unir las piezas.
Actualmente, en el lugar solo quedan recuerdos y las bellas ruinas de lo que fue una riqueza minera. Aunque ya no esté en funcionamiento sin duda es un bello paisaje con prados verdes cubiertos de neblina.
Además del aporte que se realizó al monumento más visitado por los turistas de todo el mundo, el metal obtenido de Zimapán llegó a obtener la medalla de oro en una exposición de Londres.
Cabe mencionar que el municipio es el sexto Pueblo Mágico de Hidalgo, ofrece atractivos turísticos con calles pavimentadas con mármol y hierro fundido. La comunidad de La Encarnación se ha convertido en uno de los principales sitios culturales de la entidad por su historia.
Zimapán, un Pueblo Mágico poco conocido para ir en el futuro
Al pie de la Sierra Gorda se encuentra este pueblo minero que vale la pena visitar. Con su majestuoso ahuehuete, la mística de su parroquia, el asombro de su gran presa, la magia de sus bosques y sus extraordinarias grutas.
¿Qué comer? Aquí se degusta la barbacoa, el chicharrón y la suculenta salsa de rayado. También se disfruta de la alegría y la calidez de su gente, escuchando un buen huapango entre los imponentes cerros.
En el kilómetro 202 de la carretera México-Laredo se encuentra ubicada la “Capital Minera”, llamada así no solo por la riqueza de las entrañas de sus tierras y su bonanza en la época colonial, sino también por ser el lugar de descubrimiento del vanadio en 1830.
Cinthya Carbajal